El apagón del siglo, el Papa negro y lo gafe que es Sánchez
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Nostradamus. |
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Es cierto que la sociedad actual es muy sensible al bulo y que recibe miles de ellos con los brazos abiertos, es cierto que las redes sociales son caldo de cultivo para la desinformación, la mentira y la manipulación, es penoso que algunos medios de comunicación se apunten a las Fake News y a la noticia sin contrastar a cambio de un puñado de visitas en su página web; pero si todo eso forma parte del día a día y algo a lo que estamos acostumbrados, existe un factor determinante que tendemos a olvidar y resulta, sin embargo, de enorme importancia: El cotilleo más puro y más cañí del universo; el cotilleo de las vecinas de escaleras y de los compañeros de tasca; el cotilleo que protagonizan los millones de jubilados que votan como los demás y pueden inclinar la balanza de un lado u otro; el cotilleo de cualquiera de nosotros.
El lunes, el apagón en España fue inesperado, brutal, inexplicable y demoledor. Pasaban las horas y no había nadie que pudiera explicar lo que había sucedido. Ni políticos, ni técnicos profesionales que entienden mucho del asunto, ni periodistas a los que les llega información, nadie… salvo las vecinas de mi comunidad de vecinos.
Esta es la conversación que tuvieron dos de ellas junto a mí en el momento en que subía hasta el ático con el bulldog en brazos para que no le diera un parraque. Creo que es literal lo que reproduzco.
- Ay, Dios mío que miedo estoy pasando. Sin luz todo el día y no me puedo acostar porque la máquina del oxígeno se tiene que enchufar a la luz.
-Claro, la careta esa que te pones para dormir. Ten cuidado.
- El caso es que ya me lo había dicho mi hijo, que con un Papa negro el mundo se iba al garete.
- Pero si no tenemos Papa todavía. Ya veremos si es negro o no.
- Bueno va a ser filipino, pero lo mismo da (aquí casi se me cae el perro de los brazos). Es raro. Lo hemos estado hablando ayer en la cafetería y estamos todas de acuerdo. Este presidente es un gafe.
- ¿Tendrá la culpa la criatura?
- Ese con tal de seguir en La Moncloa es capaz de cualquier cosa.
Ese era el nivel. Mezclaban la idea de Papá negro vinculada a la figura del superior de los jesuitas con la profecía del astrólogo del siglo XVI, Nostradamus (Francisco ha sido el primer Papa jesuita y algunos creen que la profecía de Nostradamus ya se ha cumplido) y con la elección del cónclave que no se ha producido y las quinielas que dan como favorito al cardenal filipino. Y era algo ya discutido tomando un café. Lo mejor la conclusión: Sánchez es un gafe y tiene la culpa de todo.
Y así vamos. Y el voto vale lo mismo.
G. Ramírez
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